Fuera hace frío, un frío intenso, con una vehemencia insospechada por hacerse notar. Los noticiarios no paran de hablarnos de fríos polares y de mostrarnos postales nevadas o carreteras cortadas. Cierto es que hacia muchísimos años que no vivíamos un invierno tan crudo, pero hoy mis sensaciones sobre cosas sencillas como una taza de café, o el acurrucarse bajo un buen edredón, o simplemente llegar a casa, se han incrementado. Se han hecho mas patentes y agradables que de cotidiano, hasta el punto de regodearme en ellas, haciendo que se ralentizaran esos instantes para saborearlos. Normalmente vamos tan deprisa que no gozamos de esas pequeñas sensaciones que nos reconfortan, y los días pasan uno tras otro agobiándonos con lo que tenemos que hacer o lo que no nos ha dado tiempo a hacer. Solo pensamos y sentimos en estrés y con estrés. Nos privamos de sentir esos pequeños detalles placenteros porque tenemos prisa y al final del día nos vamos a dormir con sensación de cansancio, pensando en lo que debemos hacer mañana. Pues hoy para mi no es así, hoy me voy a dormir con esa sensación agradable de haber vivido un día placentero. Deseo que tengáis muchos días así, placenteros, donde no prime en vuestra mente lo malo que ha pasado, pero si, aquello que os resulte agradable.
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4 comentarios:
Me alegro de que tengas días felices... Así todo será mejor... Yo estoy en las mismas :P
Te quiero un mun
no llegan a ser felices pero si agradables, por lo cual hay que ser positivos y disfrutar del pequeño rayo de sol que aparece.
edredonnnnn. cucha, ya era hora de escribieras.
te kero
Mira quien fue a hablar el que escribe un post cada 100 años :P
Y de positivo a feliz hay una venta :)
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